La forma de comunicarse de los bebés es llorando, de esta manera nos dan a entender cuando tienen hambre, sueño, etc. Nuestra labor como padres será aprender a identificar las diversas razones de su llanto para así, poder calmarlos.
Por ejemplo, una de las razones más comunes de su llanto es que tienen su pañal sucio. Algunos bebés nos darán a entender rápido cuando necesiten que se les cambie el pañal, otros después de varios minutos. Si esto ocurre, para calmarlos solo deberemos cambiar su pañal por otro limpio.
Si nuestros bebés tienen hambre, deberemos darles de comer. Una manera de identificar si tienen hambre, es que cuando les tocamos la mejilla volteara la cabeza como cuando son amamantados.
Otras razones para su llanto son por ejemplo que quieren ser cargados o estar en los brazos de sus papás. Ellos distinguen quienes son sus padres y muchas veces solo se calmarán estando en los brazos de ellos.
Pueden también estar de sueño; ellos no se acuestan y duermen en cualquier lugar, hacerlos dormir es un proceso. Algunas otras razones pueden ser cólicos u otros problemas estomacales, le están saliendo los dientes, lo cual los pone irritables por las molestias que esto conlleva, etc.
Nosotros como padres, después de cierto tiempo aprenderemos a distinguir las razones por las que nuestros bebés lloran, aprenderemos en cierta forma a leerles la mente y sabremos exactamente que hacer para calmarlos. Si a pesar de satisfacer sus necesidades no deja de llorar, es posible que sea por algún problema de salud y sería bastante recomendable llevarlo con un pediatra.
Por ejemplo, una de las razones más comunes de su llanto es que tienen su pañal sucio. Algunos bebés nos darán a entender rápido cuando necesiten que se les cambie el pañal, otros después de varios minutos. Si esto ocurre, para calmarlos solo deberemos cambiar su pañal por otro limpio.
Si nuestros bebés tienen hambre, deberemos darles de comer. Una manera de identificar si tienen hambre, es que cuando les tocamos la mejilla volteara la cabeza como cuando son amamantados.
Otras razones para su llanto son por ejemplo que quieren ser cargados o estar en los brazos de sus papás. Ellos distinguen quienes son sus padres y muchas veces solo se calmarán estando en los brazos de ellos.
Pueden también estar de sueño; ellos no se acuestan y duermen en cualquier lugar, hacerlos dormir es un proceso. Algunas otras razones pueden ser cólicos u otros problemas estomacales, le están saliendo los dientes, lo cual los pone irritables por las molestias que esto conlleva, etc.
Nosotros como padres, después de cierto tiempo aprenderemos a distinguir las razones por las que nuestros bebés lloran, aprenderemos en cierta forma a leerles la mente y sabremos exactamente que hacer para calmarlos. Si a pesar de satisfacer sus necesidades no deja de llorar, es posible que sea por algún problema de salud y sería bastante recomendable llevarlo con un pediatra.
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